jueves, 7 de septiembre de 2006

AUTOPISTA: SE REALIZO LA APERTURA DE SOBRES DE ANTECEDENTES

En la mañana del martes 5 de Septiembre, el Organo de Control de Concesiones Viales (OCCOVI) realizó la apertura de ofertas (sobre A) con los antecedentes de las empresas y consorcios que pugnan en la licitación pública nacional para la construcción, mantenimiento y explotación en concesión de la Autopista Pilar – Pergamino.

Se trata de las firmas Benito Roggio e Hijos-Esuco-JCR, José Chediack S.A.I.C.A (UTE), Corporación América–Helport (UTE), y CCI Construcciones-Petersen Thiele y Cruz S.A.

Las empresas que califiquen presentarán el próximo 10 de octubre el Sobre B, conteniendo la oferta económica, día en el que se abrirán los sobres y se adjudicará la obra que deberá comenzar el 1 de noviembre, de acuerdo con el cronograma previsto en el pliego de Bases
y Condiciones.
La Autopista Pilar Pergamino -que prevé una inversión de más de 1.000 millones de pesos- vinculará a los distritos de Pilar, Exaltación de la Cruz, San Antonio de Areco, Capitán Sarmiento, Arrecifes y Pergamino.

Tendrá una longitud de 180 kilómetros, los primeros 100 se desarrollarán por la actual traza de la Ruta Nacional 8, provincia de Buenos Aires mientras que los 80 restantes se construirán por nuevas trazas.

En una primera etapa se planea construir –desde el kilómetro 57 a la Ruta Provincial 39- dos calzadas de tres carriles por sentido de circulación con colectoras pavimentadas en los sectores urbanizados, e intercambiadores de tránsito a distinto nivel. La segunda etapa de las obras comprenderá los trabajos hasta Pergamino.

La autopista Pilar-Pergamino es un proyecto presentado bajo el régimen de Iniciativa Privada por las empresas Corporación América y Helport.

En marzo fue declarado de interés público por el presidente Néstor Kirchner, y el proceso licitatorio quedó a cargo del Ministerio de Planificación Federal, que conformó una Comisión de Adjudicación integrada por el OCCOVI, el Ministerio de Economía, Vialidad Nacional y Provincial.

El sistema de iniciativa privada le reconoce al iniciador una ventaja en la licitación: si su oferta es hasta 5 por ciento mayor que la mejor propuesta, igual se le adjudicará la obra, y si el iniciador es superado por otra oferta que sea entre 5 y 20 por ciento menor se le pedirá que realice una nueva propuesta.