martes, 1 de agosto de 2006

LUJAN: POLEMICA POR LA TASA DE ABASTO

Intercámaras solicitó se de luz verde a la eliminación de las tasas de abasto municipales. Los legisladores interpretan que hay aduanas internas y que se provoca un encarecimiento de los productos fabricados por cualquier empresa. Los Diputados omiten el hecho que de esta manera desaparecerían miles de pequeñas y medianas industrias del tipo familiar. Las que no podrían competir con las multinacionales.

Lo que omiten estos supuestos representantes del pueblo, es que cada ciudad, de esta manera, no sólo tiene la posibilidad de controlar lo que se vende, sino también de proteger la producción local. Ante lo planteado por los Diputados, se genera un conflicto de intereses, donde las grandes empresas pueden aplastar a los fabricantes locales de cada una de las ciudades donde se quite el impuesto del abasto. Un ejemplo simple: Para una pequeña empresa del tipo familiar, embotelladora de agua mineral ó sodas, no puede competir en su zona con las multinacionales. Otro ejemplo, una panificadora, también nacida en el seno familiar, con varios empleados, tampoco puede competir con las grandes empresas del rubro. Es decir, que los legisladores pretenden zonas liberadas para las grandes empresas. De esta manera, fenecen las pequeñas y medianas empresas.

En una reunión llevada a cabo en la sede de la Asociación de Industrias de Marca entre representantes de diversas cámaras que nuclean a empresarios de las industrias alimenticias (FABA, COPAL, CADAM, ASU, ADGyA, CAA, CAPA y CADIBSA, entre otras) con diversos miembros de la Legislatura Bonaerense, los empresarios elevaron un fuerte reclamo para que se sancione el proyecto de ley que pondría fin a las denominadas tasas de abasto que, desde hace algún tiempo, vienen exigiendo los Municipios más populosos de Buenos Aires y que, dijeron, ha alterado absolutamente la estructura de costos con que nuestros productos llegan al consumidor final.

Solicitan los empresarios que se de luz verde al proyecto de ley del diputado radical Luis Bruni, que dejaría sin posibilidad a las autoridades municipales de cobrar una tasa en concepto de controles, visaciones y/o inspecciones durante el traslado, transporte y/o distribución de los productos alimenticios no perecederos envasados en origen que ingresan en sus comunas. Argumentan que los productos no perecederos ya cuentan con inspecciones de los organismos tanto de índole nacional como provincial, sobre ellos las comunas tienen también la obligación de realizar controles bromatológicos una vez que se encuentren puestos para la venta en las góndolas de los comercios y por ello perciben en todos los casos la respectiva tasa denominada de seguridad e higiene.

Señalan que es necesario desmembrar estas virtuales aduanas interiores que funcionan en algunos municipios y así poner fin a una situación ciertamente irregular y, si se quiere, a contrapelo de expresas normas constitucionales. Las ordenanzas dictadas por algunos municipios con el objeto de imponer el cobro de una tasa que pretenden análoga o extensiva de la que se cobra por inspección veterinaria, esta vez con relación a los productos alimenticios no perecederos, por ejemplo: conservas, gaseosas, soda, etc; resultan sin dudas irrazonables, arbitrarias y, podríamos decir, hasta inconstitucionales, argumentan los industriales en coincidencia con los fundamentos del proyecto por el que reclaman una pronta sanción, subrayando la alta incidencia de esas tasas en la estructura de costos de sus productos.

Los legisladores, en toda esta argumentación buscan bajar costos de las grandes empresas, aquellas que tienen gigantescos repartos en cientos de ciudades y pueblos de la provincia de Buenos Aires. Omitiendo, desconocemos si deliberadamente, que en cada una de esas locaciones hay empresas del tipo familiar, las que conforman el sistema económico de cada región, las que dan trabajo y comercializan sus productos. Así que de liberarse cada zona, cada municipio se quedaría sin posibilidad de ingresos importantes, por la falta de recaudación de tasas de abasto, del mismo modo que las pequeñas y medianas empresas desaparecerían del mapa, bajo el accionar de las grandes empresas multinacionales. El interés de estos Diputados, por bajarle los costos a los grandes empresarios, ¿A cambio de qué?

(fuente: El Ciudadano)