martes, 21 de marzo de 2006

PILAR: ASFALTO POLEMICO

Prevén que los vecinos paguen las obras de asfalto. Los que quieran el pavimento deberán pagar una cuota que treparía a los 50 pesos, aunque podría ser mayor. De todos modos, «Seamos sinceros, hay gente que lo puede pagar», justificó el Intendente.
El gobierno pretende que los frentistas que deseen obras de asfalto al frente de sus casas lo paguen a través del pago de una tasa especial, que se crearía a tal fin.
La idea, al mejor estilo empresarial, surgió del jefe comunal, el mismo que la semana pasada planteó la posibilidad de arancelar algunas prestaciones del área de salud, ante el obstáculo de encontrar fuentes de financiamiento para ejecutar trabajos de infraestructura. «Vamos a ser justos y sinceros, hay gente que podría pagar y de esa manera nos aseguramos el recobro y poder mantener las máquinas. Va a ser una cuota social y en donde no se pague va a estar el Estado», sostuvo Zúccaro en la conferencia de prensa en la que presentó nueva maquinaria municipal.
Si bien Zúccaro admitió que aún se trata de una propuesta que dejará en manos del Concejo Deliberante, desde su entorno señalaron que ya estaba la decisión tomada respecto a la creación del mecanismo y arriesgaban, incluso, el monto de la cuota «social»: entre 50 y 80 pesos. Aunque, claro, el monto final quedaría supeditado a la cantidad de vecinos que se vean beneficiados con las obras.
Los anuncios de Zúccaro se dieron en el marco de la presentación de la nueva maquinaria municipal, la que integrará una cuadrilla de asfaltado.
En total se adquirieron 16 máquinas, con una inversión de 3 millones 800 mil pesos, los que se pagarán en cuotas mensuales de 70 mil pesos, que se descontarán de la coparticipación provincial.
Si bien Zúccaro había dicho el año pasado que se pensaban asfaltar 25 cuadras por mes con el sistema de material caliente, a las que se le sumarían unas 25 más con el mecanismo de material en frío, ahora prefirió ser más cauto. «Sería terrible calcularlo», respondió cuando un periodista le preguntó el número de metros que se asfaltarán. «Cuando dé inicio a las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante voy a dar la planificación de lo que tenemos pensado», justificó.
Con los ojos cerrados
El gobierno pudo adquirir la maquinaria luego de resolver un problema con el Banco Provincia, a raíz de un leasing que había quedado impago desde gestiones anteriores.
Es que el ex intendente Sergio Bivort incumplió los pagos de las cuotas de varias máquinas, que más tarde fueron robadas. Otras que también se perdieron no habían sido denunciadas en tiempo y forma, por lo que el seguro jamás reconoció la pérdida, porque en el pago mensual estaba incluida la póliza.«Sin mirar hacia atrás es que pagamos lo que debíamos y ahora podemos comprar más máquinas», se despegó Zúccaro.
Además de los ojos, el jefe comunal quizá se tapó los oídos y jamás escuchó el fuerte rumor que indicaba que alguna de las máquinas sustraídas habrían estado funcionado en campos del interior del país de una tradicional familia pilarense.
(fuente: Pilar de Todos)